Invitado

Éste sábado he sido invitado por unos conocidos a disfrutar de una mujer en un apuro. A veces las fantasias pueden hacerse realidad y no es que sean realmente fantasías, sino que se dan las circunstancias en que los hechos se precipitan. El caso es que, como digo, precisamente el sábado día de la Lactancia Materna, por la noche, tendré ocasión de poder disfrutar de una mujer casada que va a pagar unos excesos de su marido con su cuerpo. Será un ambiente extremadamente tenso pero también morboso. Se han hecho pactos y habrá que respetarlos pero eso no quita el hecho de que, después de mucho tiempo, voy a poder gozar de una mujer que involuntariamente va a entregar su cuerpo a cambio de saldar una deuda de juego.

Esto es una demostración que con la perseverancia, con buenos contactos y paciencia, todo llega y así va a ser el sábado. Vamos a ser 4 hombres, más yo y una mujer de 29 años, madre de un niño de 3 (sin leche, tranquilos. Ojalá hubiese tenido porque ya lo pregunté) que nos dará placer durante una noche entera a cambio de que estos conocidos, se olviden de la deuda contraida por su esposo. La verdad es que dudo mucho que con eso se olviden y creo yo que la mujer, que aún no lo sabe pero no es tonta, va a tener que hacer más favores durante más tiempo para saldar las cuentas pendientes de él.

Ayer pude ver la foto de la esposa. Nos la enseño el marido y tengo que decir que la zorra no está mal. Mi polla ha tomado el mando, más por el morbo que por el fisico de ella en sí y solo espero al sábado en el chalet a las afueras de mi ciudad donde ella debe acudir con él. Y es que se ha decidido que él vea las consecuencias que tiene meterse en lios.

No os prometo nada, pero estoy decidido a joderla bien duro y descargar adrenalina acumulada y leche almacenada. Eso sí, uno de los pactos a respetar es que su culo debe ser preservado. Lástima.