Ayer fue un viernes interesante ya que logré quedar por la tarde, con "C" para ir juntos a ver a mi colega accidentado. Además aproveché para invitar a
Viciosenos, que hacía mucho tiempo que no lo veía para que se uniera a la visita. Así que fuimos los 3... pero no eramos 3 si no más bien... 3 y medio ya que "C" vino acompañadada.
El crio, su bebé, el enemigo respetado pero "odiado" que supone toda criatura de teta recien nacida, vino con ella y solo verla aparecer en la entrada del centro de rehabilitación donde se encuentra mi colega, con el cochecito, sonrió al ver mi cara.
C - Hoy vengo acompañada.
Yo- Ya veo
Viciosenos, que mi trabajo me había costado convencerlo para traermelo conmigo, me miró sin poder evitar la sonrisa de oreja a oreja. Le presenté a "C" y ambos se dieron un beso, acto por el que salió ganando
Viciosenos ya que por cuestiones que no vienen al caso "C" tuvo que inclinarse bastante dejando un buen escote momentaneo semi abierto donde hizo las delicias hambrientas de mi amigo.
Los dejé ahí y fui a buscar a mi accidentado colega. La idea era ir a tomar un café en cualquier terraza cercana y después... pero la presencia del bicho, lo había trastocado todo.
Al poco rato, estabamos tomando las consumiciones y hablabamos de cosas fáciles para ir rompiendo un poco el hielo.
Viciosenos, como siempre, el más callado y el más observador. Mi colega, hablaba con más fluidez con "C" ya que en comparación conmigo, se habían visto más a menudo. Afortunadamente, el bicho (entiendase crío) no daba demasiado la lata y dormía placidamente en su cochecito.
C- Es una monada. Muy bueno.
"Frase hecha que identifca a una mujer como madre" Me dije.
Sonreí con pocas ganas. De esas sonrisas falsas que no pasan ningun examen de sinceridad básico y ella lo notó.
C- Parece que te han pisado un juanete. (Y mirando a los demás, incluido a mí, añadió) ¿Os ha molestado que viniera con mi ricura.
Un "Nooo" aun más falso salió en una competición no declarada para ver quien lo decía primero. Pero "C" sabía que, aunque no nos molestara, no cabía duda de que era un detalle con el que no habíamos contado.
"C" ya sabe bien nuestra pasión por los pechos y la leche materna. Solo no lo tenía claro por
Viciosenos (que no lo llamabamos así, claro, si no por su nombre real) pero cuando este punto también quedó claro. Ella pasó al juego directo.
C- Que buenos pareceis.
Nos miramos asi como haciendonos los despistados y ella emitió una risa inocente dando un nuevo trago a una orchata que había pedido, en contraste con las birras que nosotros habíamos solicitado al final. En ese justo instante, el bicho emitió algunos quejidos o amagos de lloriqueo.
"Me cagon..." Volví a decirme.
"C" se levanto y al inclinarse para coger al engendro cagapañales del cochecito, el afortunado fue esta vez mi otro colega que vio el escote bien abierto. Me miró y sin pronunciar sonido alguno pude leerle los labios que me decía "blancos". Al principio no atiné pero luego sí. Debió ser por lo que a continuación se dispuso a hacer "C" delante de todos nosotros y publico relativo ya que nuestra mesa se encontraba a un extremo de una calle que daba a una zona poco transitada. Como digo, "C" cogió al bicho y se lo puso en su regazo. Acto seguido, mostrando una despreocupación absoluta, al menos eso pareció, se desabotonó los primeros botones del vestido descubriendo una de las copas de sus sujetadores blancos de lactancia. Desató el enganche y en un plis plas, el bicho estaba... donde cualquiera de los tres hubiese querido estar. Asi estuvo unos pocos segundos hasta que sin elevar la cabeza, "C" comenzó a reir suavemente. Al menos fue sincera al añadir:
C- Qué cabrona soy.
Yo- Mucho.
C- Oye, no te pases. Que lo diga yo es una cosa, que lo diga otro, otra.
Yo- Solo he dicho "Mucho".
Siguió riendo y
Viciosenos estaba como en estado catatonico. Supongo que hacia la tira que o veia en directo una teta lechosa proporcionando leche, aunque fuera a uno de nuestros enemigos naturales, como Vampiros Blancos. En cuanto a mi colega ingresado, mostraba deseo de amorrarse al otro pecho, como nos ocurría a todos, pero en comparación con
Viciosenos, habíamos tenido el privilegio de haberlo hecho ya aunque quedara lejos en el tiempo.
Yo- Bueno al menos la duda principal que tenía ha quedado aclarada.
"C" seguía dandole de la misma teta al bicho y elevando la mirada me interrogó haciendose la curiosa en una curiosidad falsa. Al instante hizo una mueca con la cara en actitud de indicar comprensión como un "ah, ya lo he pillado" y añadió:
C- "Seis meses". Esa es la idea que de momento me marco de plazo.
Yo- Entonces si no llevo mal la cuenta... quedan cuatro meses...
C- Tres y medio más o menos aunque todo dependerá de si me las va a destrozar antes o no. No quiero quedarme sin tetas.
A continuación, se dispuso a cambiar de pecho al repelente enanano (¿se nota que me caía por momentos peor?) Eso hizo que su pecho liberado quedara unos 10 segundos libres. Lo justo para dar la vuelta al crio, desabrochar la otra copa y enchufarle el suculento pezon de nuevo. Mientras la cosita asquerosita mamaba, "C" comenzó a meterse el pecho liberado en mejor posición y pudimos ver como de su pezon rosado goteaba algunas gotas de leche. Fue para ponernos enfermos. Ella volvió a reir levemente conteniendose para no alterar al crio y se tapó al fin la mamella y la ocultó con el vestido.
Mi amigo no puedo reprimir un "Joder" y
Viciosenos seguía sin reaccionar.
Al cabo de un rato, el engendrito fue puesto sobre el hombro de "C" para que soltara los eruptitos de rigor. Con lo que había mamado, a mi juicio me preocupaba el hecho de que con las vibración de los eruptos no explotara algun cristal cercano. Mi colega, a petición de "C" le puso una toalla en el hombro de ésta, para evitar mancharse si la cosita meapañales vomitaba un poco. Lo cual, suele pasar. Esos bichos son egoistas por naturaleza y tragan hasta reventar. Durante otro medio largo minuto más, la teta quedó expuesta y goteando levemente leche. Fue en el único momento en que ví a
Viciosenos reaccionar porque pilló su movil disimuladamente con la evidente intención de hacerle una foto y "C" fue rapida de reflejos. Tapandose la teta exclamó "Manos lejos del movil".
Y me acordé de nuevo de mi admirado
Tetasperú y aquellos heroes que se juegan las pelotas filmando tetonas en cualquier lugar y hora. Tendre que invitarlo un día a que nos de una conferencia de como conseguir fotografiar pechos hacer castings reales a españolas sin mayor problema. Algunos seguimos estando muy verdes en el temas y parece que las tetonas nativas de mi país temen acabar sistematicamente provocando litros de semen sin saberlo. ¿No será que en el fondo lo deserian?
Todo aquello parecía divertido y de hecho lo era pero como me ocurre habitualmente y sin poder controlarlo demasido, hay momentos que decido ponerme un poco serio y a veces eso da paso a ponerme tenebroso, por decirlo así. En este caso, no me puse
depravariano pero sí algo más serio y lancé una ofensiva que iba a resultar... fatal.
Yo- Dime. ¿Hay posibilidad de que podamos mamar nosotros pronto?
"C" me miró sorprendida. Ahí delante de mis dos colegas y tan directo... no entraba en su calculo pero supongo que notaba que en cierto modo, me había puesto un poco en el limite del aguante.
C- Hombre... asi en frio... No me estas pidiendo que te corte el pelo, precisamente.
Yo- No. Ya lo se pero sabes que habitualmente no me gusta ir con muchos rodeos. Sabes lo que soy, lo que somos (y miré a los demás) y con respeto te lo he preguntado. Tenemos sed y algunos lo tienen mucho peor que yo para poder saciarse.
"C" se puso algo tensa.
C- Es que... no se como decirlo pero no es algo agradable del todo ¿entiendes? Me siento como si fuera un trozo de algo. Una vaca en toda regla.
Y lo de "vaca" lo dijo con mezcla de humor pero también con señal clara de molestia. Sabía que estaba entrando en terreno pantanoso y vi que al menos mi colega en rehabilitación, me miraba como diciendome "Afloja". Pero no aflojé.
Yo- Te entiendo y te pido disculpas si te sientes así pero siempre te he demostrado ser un hombre claro y directo. Tengo tiempo para el desenfado y tiempo para las cosas serias. Quiero tus pechos. Ellos (y los miré de nuevo) también estan hambrientos y tú eres una mujer comprensiva. Lo has demostrado de sobras. Si se trata de compensarte de algún modo, exponlo en confianza.
"C" me miró tal vez un poco más molesta si cabe y comprendí que estaba tensando demasiado la cuerda.
Viciosenos parecía el más incomodo de todos. Por algo era el más timido, desde siempre.
C- Mira estoy sin curro pero no soy una puta. No se si me explico.
Yo- Para ti darnos el pecho ¿es ser una puta?
C- En cierto modo sí, Sobre todo si insinuas que quiero dinero a cambio.
Yo- Eso lo has dicho tú, "C". Yo no te he ofrecido dinero y por supuesto no te considero una puta. Ninguno de los de aquí te considera como tal.
C- ¿Entonces que soy para ti?
Aquella pregunta tenía trampa y lo noté al instante. Mi colega me miró y pude leer en en sus ojos el alivio de no encontrarse en mi pellejo justo en esos momentos. Suspiré y mirandola fijamente, respondí.
Yo- Para mí eres una excelente persona a la que admiro y aprecio pero también eres una mujer lactante y eso prevalece por encima de lo demás.
"C" permaneció callada unos instantes. Acto seguido miró el reloj de pulsera y dijo que tenía que marcharse. Dió un beso a
Viciosenos y a mi colega pero no a mí. Cogió el cochecito con el bebé y se marchó. Ahí nos quedamos los tres
VB solos y lo que es peor. Ninguno de ellos parecía muy satisfecho de mi intervención.
Al cabo de no mucho tiempo más, estaba en casa. Me duché y sali de caza. Macrodiscoteca a las afueras de mi ciudad. 2-30 AM. Judith, 23 años. Buenos cantaros (talla 95 calcule), cabello corto rubio y mirada de puta. Necesitaba 20 euros para unas pastis. Estaba medio colocada. Su boca y sus tetas a cambio de los 20 euros. Nos fuimos a los servicios. Me pajee con su entreteto y le follé la boca antes de correrme en sus manos.
Hoy volveré a salir de caza. Eso es lo que hacemos los tipos como yo. Usar toda mujer apetecible. Porque para eso fueron creadas.
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